29 Dic El supervisor, el ‘coach’ del negocio
¿Por qué muchos supervisores no obtienen la colaboración y no logran aumentar la productividad de sus empleados, mientras otros logran que su gente trabaje con entusiasmo, saque el trabajo como se debe y exceda los números de producción y calidad?
Los supervisores necesitan saber motivar a sus empleados para que logren una alta producción de calidad día tras día, semana tras semana, mes tras mes. Los supervisores efectivos saben aplicar los siguientes secretos como el coach de su equipo.
Crean equipos de trabajo. El supervisor moderno premia el trabajo por equipo al mismo tiempo que menosprecia la importancia del trabajo individual y la rivalidad entre los trabajadores de su área. Después de asignar una parte importante de trabajo con criterio de medición a cada equipo, el supervisor debe fomentar la comunicación, interacción y colaboración entre los miembros de los equipos.
Saben escuchar óptimamente. Nada causa tantas pérdidas de material, producción, tiempo y ventas como no saber escuchar. Los supervisores triunfadores saben enfocarse en el mensaje de las personas a quienes escuchan, pueden sacar el verdadero significado del mensaje y responder de una manera directa, honesta y positiva. Si critican el trabajo de algún empleado, siempre buscan algo positivo antes de brindar su análisis y recomendación como su coach. Es así como desarrollan trabajadores efectivos.
Comunican la misión de la empresa. Los supervisores modernos comunican incesantemente la misión de la compañía y los requisitos del cliente. Recuerdan con precisión y claridad a la gente de sus equipos las prioridades del trabajo. Un supervisor efectivo tiene la costumbre de decir individualmente a todos que quiere que ellos triunfen, que den valor agregado a la empresa y disfruten de su propia labor de calidad en conjunto del equipo. Capacitan a su personal sobre cómo sacar trabajos de alta calidad.
Aunque las empresas siempre buscan maneras de sacar el trabajo más rápido y al menor costo posible, el supervisor reconoce el trabajo hecho bien desde el principio.
El método japonés del kaizen ha demostrado que la producción mejora si se hace el trabajo bien la primera vez y no por la rapidez. Estos supervisores ayudan a sus empleados a trabajar mejor, a analizar problemas, a corregirlos y a traer mejorías en todo aspecto del trabajo. El próximo artículo se referirá a los gerentes como líderes de las empresas.
Por José Ignacio García es consultor de empresas y profesor de Liderazgo y Administración de Empresas en la Universidad Luterana de California.
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